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No estamos hablando de una bebida que se toma en Mexico, ni de un pokemon.
(Squirtle)
Nada que ver!!!... Estamos hablando de sexualidad. Metámosle mano al asunto 😉.
El "squirt" es un término anglosajón que significa "chorro", y sin duda es un tema que genera debate. Ni siquiera lxs profesionales de la sexualidad (ginecólogxs, sexólogxs, urólogxs, etc.) han logrado ponerse de acuerdo para definirlo con precisión.
Incluso hay especialistas que sostienen que el squirt es un mito creado por la industria pornográfica y que, en realidad, es lo mismo que la eyaculación femenina.
Lo cierto es que esta discusión refleja lo poco que se ha investigado sobre la sexualidad de las personas con vulva, un ámbito en el que la ciencia todavía está en deuda.
En meibi, por ahora (hasta que la ciencia diga lo contrario), creemos que el squirt es real y existe. Queremos contarte lo que sabemos, así que... ¡prepárate para empaparte de información!
El squirting es un fenómeno en el que se expulsa un líquido proveniente de las glándulas de Skene (ubicadas a los lados de la uretra) a través de la misma uretra.
Este líquido está compuesto por urea, creatinina, ácido úrico, líquido prostático (dato interesante: las mujeres también tienen próstata) y pequeñas concentraciones de orina.
El squirt no está directamente relacionado con el orgasmo, es decir, puede ocurrir durante el clímax, simultáneamente o de forma independiente.
No hay recetas mágicas en la sexualidad, así que es imposible darte un guion exacto sobre cómo provocar un squirt. Cada persona vive la sexualidad de manera única, por lo que las experiencias y sensaciones varían.
Expertxs dicen que el squirt es 50% técnica física y 50% técnica mental.
Muchas personas que han experimentado un squirt mencionan que lo lograron a través de la estimulación del punto G y el clítoris. Algunas lo consiguen con los dedos, otras mediante penetración y muchas con juguetes.
(De hecho, una chica nos contó que logró su primer squirt con HARU, un juguete de estimulación externa).
Por cierto, la seca de ERIKA LUST (referente del porno ético) tiene un excelente video educativo y explícito con la actriz KALI SUDHRA donde explica este tema. Vale la pena verlo.
Pero, volvemos a lo mismo de siempre (parecemos disco rayado, lo mencionamos en cada meibi.talk): la sexualidad de cada persona es única, así que la forma de sentir placer también lo será. O sea, "lo que le funciona a la Pame no necesariamente le funcionará a la Vale".
Parece que no. Aunque ambas secreciones provienen de las glándulas de Skene y la próstata femenina, son diferentes.
Algunas diferencias clave:
Son fluidos distintos: la eyaculación femenina contiene fosfatasa ácida y PSA (hormona prostática), mientras que el squirt tiene pequeñas cantidades de orina, urea, creatinina, ácido úrico y líquido prostático.
El squirt puede producirse en grandes cantidades, mientras que la eyaculación femenina ocurre en volúmenes pequeños.
La eyaculación femenina suele ocurrir de forma involuntaria, mientras que el squirt (aunque también puede ser involuntario) se puede provocar y aprender.
La eyaculación femenina tiende a ser más blanquecina.
Esto es lo que se sabe hasta ahora. Existen estudios pioneros, pero todavía falta mucha información por descubrir.
¡Dale! Anímate, es una experiencia distinta y liberadora! Es un proceso de soltar, de dejarse ir y entregarse al placer. Y claro que puedes lograrlo, aunque algunas personas lo consiguen más rápido que otras.
Lo más importante es que si nunca lo logras, no pasa nada. No tienes por qué hacerlo. Tu sexualidad no está incompleta ni menos desarrollada por eso.
El placer va mucho más allá de un punto, una zona o una experiencia específica. ¡Disfruta a tu manera!